Qué gran personaje es don José Frade. No sólo se acuesta con la vedette española más importante de todos los tiempos sino que además es el dueño de la televisión local más peculiar del país. Ya les he hablado en más de una ocasión en el Encantador Weblog de lo mucho que me gusta Canal 7. Una televisión con un programa semanal sobre podología merece todos mis respetos. He de reconocer, eso sí, que últimamente la Fradevisión está un poco de capa caída, hasta dicen que don José quiere vender su imperio catódico, pero no puedo resistirme a comentar el nuevo programa que ha llegado a la parrilla de la cadena.

Antes de nada, y para poner en antecedentes a los de fuera de Madrid, decir que hasta hace poco el programa estrella de Canal 7 era “Tómbola“, que durante varios años se ha emitido en esta cadena un hito de la telebasura como fue “Mentiras arriesgadas” de Leticia Sabater y que, al menos hasta ayer por la noche, el programa que se emitía todas las noches en Canal 7 era “Corazón del Milenio” que, como su propio nombre indica, no hablaba de literatura y que estaba cayendo en picado a medida que sus presentadores iban abandonando Fradevisión para convertirse en colaboradores de programas del corazón de cadenas nacionales.

Pues bien, esta noche me he sorprendido al ver que en vez de “Corazón del Milenio” están echando un nuevo programa llamado “Maldito Corazón“. No hace falta ser muy listo para darse cuenta por el nombre (¿quién pondrá los nombres a los programas de Canal 7? “De hecho… ¡Pareja!“, “Play Music“, “Las Chicas y Los Chicos“,…) que es un programa que pone a caer de un burro a los periodistas de la prensa rosa y a los paparazzi.

Puede que usted sea uno de esos que en vez de ver “Aquí Hay Tomate” ven los leones de La 2 (me consta que hay alguno que lo hace) y puede que no estén muy al tanto del culebrón Ostarcevic-Duval-Frade-Rothlander, así que se lo resumiré diciendo que cuando José Frade ha visto que la prensa del corazón, que tantos millones le ha dado y que él ha alimentado (o sobrealimentado) durante muchos años en su cadena, se ha interesado también por su vida privada, ha cambiado por completo su escala de valores y se ha convertido en un defensor acérrimo de la privacidad de los famosos llegando incluso a crear un programa para criticar lo que hasta ayer se emitía en su cadena (y que supongo seguirá emitiéndose a partir de mañana siempre que no hablen del matrimonio Frade-Duval).

Lo que más me ha gustado de “Maldito Corazón” es que es un programa en el que tres periodistas debaten sobre los temas antes mencionados y en el que los tres defienden exactamente la misma opinión (que Frade). Y no es de extrañar que en este nuevo programa haya tanta pluralidad, porque todas las tardes una voz en off lee en Canal 7 todos los artículos de opinión y los editoriales de La Razón, el ABC y El Mundo. Definitivamente, Frade de mayor va a ser Berlusconi.

Escuchando: Begoña Bang Matu & Orquesta Kingston - Paso en Tampa

ACTUALIZACIÓN: Qué bueno que es este libro. Desde su web se pueden leer las primeras páginas, que no tienen desperdicio. Para que se lo compren a sus churumbeles cuando sean padres.

Escuchando: Public Enemy - Don’t Believe the Hype

ACTUALIZACIÓN: Pero cómo son nuestros amigos populares… ahora el señor diputado del Burgo ha denunciado a “Lo Más Plus” por emitir el microcorto “La mejor manera de cocinar un Cristo para dos personas” de Javier Krahe, rodado además hace tres décadas. Ojalá hubiera en este país más mentes lúcidas como las de Krahe y menos censores sin sentido del humor como del Burgo o Rabanera. Comprendo que la gente tenga ganas de ver en la cárcel a Ana García Siñériz pero estas no son formas de conseguirlo.

Muchos ciudadanos anónimos criticaron en su día que metieran un transexual en la última edición de Gran Hermano. Otros ciudadanos menos anónimos y del PP han criticado esta semana que el Gobierno utilizara el programa de Mercedes Milá para dar a conocer al vulgo la Constitución Europea. Pero lo que nadie ha criticado todavía, a pesar de ser algo mucho más grave y peligroso, es una siniestra estrategia política que puede estar llevándose a cabo utilizando este reality show.

Este año han metido en la casa de Guadalix a tres militares. Esto podría sonar a chiste teniendo en cuenta que dos de ellos son Nicky y Bea, pero la cosa se pone seria cuando vemos que el tercero, un fornido muchacho que responde al nombre de Conrad Chase, es un ex-marine americano. A priori no tendríamos porqué desconfiar de un ex-marine, todo el mundo puede, como San Pablo, caerse del caballo y abandonar el camino incorrecto pero piensen por un momento qué pasaría si detrás de este ciudadano americano estuviese la CIA, el FBI, la NSA o cualquier otra oscura agencia yanqui. Ya, ya sé que suena a absurdo pero si usted fuera una cabeza pensante de alguno de estos acrónimos, ¿qué podría utilizar para tener controlados a esos españoles que están en contra de invadir países infieles, un microchip implantado bajo la piel tal vez?

Un español nunca se dejaría meter un circuito en el cuerpo, por mucho que nos digan que puede salvarnos la vida al contener nuestro historial médico. Desengañémonos, a los españoles nos la trae floja nuestra salud. Si alguien quiere meternos un chip tiene que convencernos con razones de peso y, curiosamente, ha sido Conrad, el concursante de Gran Hermano, el que ha caído en qué es lo que realmente consigue movilizar a los españoles: los cubatas.

Conrad es el dueño de una discoteca en Barcelona, una discoteca tan vanguardista que a sus mejores clientes les implantan un microchip (como los que llevan los perros por si se pierden) en el que se lleva la cuenta de las copas consumidas. Y no es broma. Aquí puede leerse una entrevista al ex-marine y ver fotos de cómo le implantan a él el primer chip cubatero. ¿Se imaginan qué podría pasar si, una vez implantados, los microchips se utilizaran para cualquier cosa más perversa que para llevar la cuenta de las consumiciones?

Ustedes, inocentes como son, pensarán que nadie va a ser tan estúpido como para ponerse un microchip de esos pero se equivocan. Según esta noticia Aida Nízar, Jorge Berrocal (otro ex-militar) y Silvia Fominaya ya pagan sus güiscolas de esta forma tan moderna. Y, les guste o no, los que crean opinión y marcan tendencias en este país no son ni Teresa Fernández de la Vega ni Jiménez Losantos sino los tertulianos de Crónicas Marcianas. Dentro de poco los jóvenes de este país recibirán los sonitonos directamente en sus microchips.

Más información aquí y aquí.

Escuchando: The Beatles - The Continuing Story Of Bungalow Bill

Hoy empieza la enésima edición de Gran Hermano y tengo muchas esperanzas puestas en esa edición. Los encargados de hacer los castings para los reality shows de Telecinco ya tienen la suficiente experiencia como para meter en la casa a un grupo de infraseres que nos haga reir a base de grandes dosis de sexo, violencia, drogas, insultos y demás.

Todavía no sabemos qué sorpresas nos aguardan en Guadalix. Tampoco sabemos cuál será la miroría marginal que tendrá esta vez represenación en el concurso. Ya hemos tenido moros, lesbianas, negros, prostitutas, aldeanos, italianos, militares, seminaristas,… Espero que la de esta vez sea aún mejor. Lo único que sabemos con seguridad es que (casi) todas las meretrices aspirantes a convertirse en tertulianas del programa de Sardá gracias a su vocabulario arrabalero que van a entrar en la casa acabarán tarde o temprano enseñando las tetas en la portada del Interviú.

No tiene ningún mérito acertar quién saldrá con las tetas más grandes o más caídas, pero sí que lo tiene pronosticar quién será la primera en llegar a los kioscos. Por eso voy a poner en marcha una porra. Intenten adivinar, una vez sepan los nombres de las damiselas que compiten por el premio del concurso y por el de decir más veces la palabra “puta” en Crónicas, quién será la primera a la que veamos desnuda y el que lo acierte se llevará, el día que salga a la calle, un ejemplar de la revista firmado (por mí). No vale repetir respuestas.

Escuchando: Hertzainak - Si vis pacem parabellum

ACTUALIZACIÓN: Sé que no les importa, pero acabo de quitarme un gran peso de encima y quería compartir la experiencia con ustedes. Acabo de descubrir el origen de un olor muy extraño que no conseguía hacer desaparecer de la cocina de casa. Había una bolsa con una sustancia no identificada a causa de su avanzado estado de descomposición escondida debajo de una bandeja del frigorífico. Estaba colocada de tal forma que el líquido que emanaba la bolsa salía por un agujero y caía en la parte trasera del frigorífico. Yo limpiaba con frecuencia la parte de atras del electrodoméstico pero aquel misterioso y maloliente líquido volvía a aparecer a los pocos días convirtiéndose su origen en el gran enigma de este verano hasta hace unos minutos. Espero que no fuera una broma de despedida de mis ex-compañeros de piso. Y ya, ya lo sé, tendría que haber limpiado el frigorífico antes.

¿Qué pensarían si alguien les dijera que “Música Sí” es un programa para jóvenes intelectuales? Seguramente se reirían del que afirmase esto. Y harían mal, porque “Música Sí” es un programa con profundos y complejos valores culturales si lo comparamos con otros productos televisivos juveniles.

Por fin los jóvenes tenemos un programa con el que sentirnos identificados, un programa que no nos exige que sobrepasemos un mínimo de cociente intelectual para llegar a comprenderlo, un programa que es capaz de transmitir de forma directa y sencilla los tres valores que todo joven debe tener (estar guapo, estar sontiendo y estar bailando). Y todo esto se lo debemos al gran José Frade, que aparte de acostarse con Norma Duval, es dueño de la mejor cadena de televisión del país, Canal 7, donde echan por las tardes el programa que revolucionará el panorama televisivo juvenil, un programa con un nombre imposible de superar: “Las Chicas Y Los Chicos”.

(pulsando sobre las fotos se ven más grandes)

He visto hoy el programa por primera vez, y sólo he visto la segunda mitad, pero me ha encantado ver que por fin alguien nos comprende a los jóvenes imbéciles. El formato del programa (al menos lo que he podido deducir del rato que he visto) es una sucesión de actuaciones en las que una veintena de chicas y chicos (creo que de ahí viene el nombre) hacen versiones (y playback) de artistas tan dispares como Ana Belén, Los Payasos de la Tele, Radio Futura o Antonio Flores. Mientras uno canta los demás llevan a cabo unas coreografías absurdas en las que las chicas salen siempre en sujetador.

Entre actuación y actuación hay secciones breves pero intensas como una llamada “Graffiti” en la que, como los más astutos habrán conseguido adivinar, sale un tío haciendo un graffiti. En otra sección, “La encuesta”, han recuperado imágenes de archivo de hace unos diez años en las que preguntaban a un grupo de estudiantes en la madrileña Ciudad Universitaria acerca de la legalización de las drogas. Y en la tercera sección que he visto, una de belleza, un grupo de chicos y chicas del programa daban consejos como no beber refrescos con hielo estando sudado o echar dos gotas de lejía por litro de agua para lavar las verduras.

Pero lo que más me ha gustado del programa, por lo que Frade merece un olé, es la jerarquía de los chicos y las chicas. No hay presentador, ni cantantes, ni colaboradores ni bailarines. El que canta en una canción en la siguiente aparece bailando en el ballet, y la que primero baila después da consejos de belleza o presenta la siguiente actuación. Se acabó la lucha de clases, el socialismo bien entendido es el de los programas de José Frade.

Escuchando: Jacques Brel - Madeleine

No tengo muchas ganas de actualizar y ando falto de ideas, así que voy a hacer lo más sencillo: hablar de la mal llamada televisión basura, y más concretamente del último ejemplo de este moderno arte, el reality show bigbrotheriano “La Casa de tu Vida“.

Cada vez me gusta más este programa. Yo que ya me había desengañado, que después de “Gran Hermano VIP” y “El Castillo de las Mentes Prodigiosas”, de los que fui capaz de ver poco más que el primer programa, pensé en el final de este estilo televisivo, he de reconocer que con el nuevo reality show me ha pasado justo lo contrario. Cuando lo vi anunciado pensé que iba a ser una mierda, pero según pasan los días le voy cogiendo más gusto al programa y prácticamente es lo único que he visto los últimos días por televisión.

Quiero felicitar desde aquí a los que han hecho el casting a los participantes. Todas las parejas son geniales: los heavies satánicos, los mariquitas gaditanos, la católica de 29 años que quiere llegar virgen al matrimonio y el pobre de su novio, las clones de Belén Esteban, el matrimonio borde con cinco hijos,… De ese cóctel social sólo pueden salir o situaciones graciosas o sangrientas. Encima llevan apenas una semana y ya están a punto de matarse en una de tantas discusiones y además una de cada tres palabras que se pronuncian en el programa es “puta” o “cojones”. Sólo faltan un par de infidelidades o un intercambio de parejas para que se convierta en el programa más entretenido de la temporada.

Escuchando: Sex Pistols - Liar